viernes, 29 de abril de 2016

Los verdaderos nativos digitales

Escucho a Converso hablar de nativos digitales, sobre lo que ya había escrito Enrique Dans, de como están sobrevalorados, como su conocimiento de las nuevas tecnologías se limita en muchos casos al uso de las herramientas sociales (instagram, twitter, facebook, etc...), de su incapacidad de ir mas allá y como dicho conocimiento en muchas ocasiones no es superior al de sus padres. De los auténticos geeks que si saben exprimir la tecnología, aprovechar todo su potencial y moverse en un mundo cada vez mas digital.

Y yo recuerdo, y pienso en los auténticos (al menos para mi) nativos digitales (o llamenlos nativos digitales de primera generación), aquella generación (la mía) en cuyos hogares entraron por primera vez por la puerta grande los microordenadores de 8 bits (spectrum, amstrada, commodore, msx).

Aquella generación, que en muchas ocasiones, además de jugar, aprendió los rudimentos de programación (el interprete BASIC), que hicieron su primer programa "Hola mundo" y que en ocasiones se convirtieron en programadores y desarrolladores, en una época (la edad de oro del software español) en que la creación de un videojuego a veces implicaba un equipo de dos o tres personas, en que las máquinas estaban tan limitadas (64 o 128 ks de memoria) que aquellos equipos eran capaces de auténticas maravillas gráficas y enormes cotas de jugabilidad.

Usuarios que podían crear un juego tecleando farragosas páginas de código (en el manual del amstrad CPC se incluían en el anexo un par de ellos y eran bastante aceptables), que "hackeaban" los juegos a base de pokes igualmente ininteligibles (y publicados en revistas míticas como Microhobby o Micromanía).


Aquella generación que no tuvo continuación, pues los sucesores de los 8 bits fueron consolas de 16 bits (Mega Drive y Nintendo Master System) que dejaron de ser ordenadores y anulaban cualquier posibilidad de interactuar con la máquina, y que a partir de aquel momento únicamente evolucionaron en el apartado hardware, cada vez mejores procesadores, mandos mas adaptados, mas memoria y mejores gráficos.

Aquella generación de una industria del videojuego español que por primera vez colocó a españa en la élite de la industria del ocio, compitiendo de tu a tu con los estudios ingleses, pero que por desgracia y salvo honrosas excepciones (Dinamic y algunos mas) acabó desapareciendo.

Aquella generación que hoy en día, a través de exposiciones,jornadaseventos y asociaciones, sigue venerando y cuidando con mimo aquellas máquinas, aquellos cacharros voluminosos y de estridentes pitidos, una generación que no olvida.

Por todo ello mi pequeño y querido homenaje a aquellos nativos.

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